Violeta Parra en el Séptimo Arte y sus hermanos menores
Por María Estévez-Serrano.
No siempre ocurre así, pero a menudo la huella que deja un artista en la historia puede medirse por el interés que despierta en el cine y la televisión. Y a su vez este hecho alimenta el interés del público general por él o la artista ya que tanto el séptimo arte como la pequeña pantalla tienen un alcance que las otras artes muchas veces quisieran para sí.
Violeta Parra es uno de esos casos. Este año se conmemoró el 100 aniversario de su nacimiento y se cumplen exactamente 50 años del fallecimiento de esta trovadora natural de Chile, que privó al mundo de genialidades que nunca veremos. En este tiempo el cine y la televisión han rendido ya tributo a Violeta Parra en modo de ficción, documental, cortos y largometrajes. A continuación haremos un recorrido por los imprescindibles.
El primero de ellos es el documental de Luis R. Vera “Viola Chilensis” de 2003 que según su propio director, es un documento de amor y lucha. Es un viaje de la mano de aquellos que conocieron a Violeta Parra, la vivieron, la sintieron, la sufrieron y la amaron. El título evoca esa nomenclatura científica de los libros de biología donde se clasifica a las especies naturales por familias. “Viola Chilensis” se nos dibuja a través de testimonios y material de archivo donde podemos disfrutarla en primera persona, como un ejemplar raro, extinto, único y autóctono de la identidad y sentir chilenos.
“Leonardo Da Vinci terminó en el Louvre y la chilena Violeta Parra empezó en él”. Con estas declaraciones del filósofo, compositor y musicólogo chileno Gastón Soublette comienza el documental de 2006 con el que la Televisión Nacional de Chile (TVN) le rindió tributo. El documental es uno de los diez que conforman el programa “Grandes Chilenos de Nuestra Historia” y en la que junto a Gabriela Mistral, son las únicas dos grandes mujeres chilenas que se incluyen. De una manera más o menos lineal, deteniéndose en los momentos más significativos de su vida y obra, y con testimonios también de algunas de las entrevistas que ella misma hizo en sus viajes para recopilar el folclore chileno no documentado, es un material muy rico para entender la grandeza del legado que nos dejó.
Un lustro más tarde, en 2011, el director también chileno Andrés Wood lleva a Violeta Parra a la gran pantalla con el largometraje “Violeta se fue a los cielos”. Una obra que de forma muy acertada no lleva un orden temporal sino que viaja a saltos, va y viene de un lugar a otro como Violeta hizo en vida, incansable. Y que como sus pensamientos, volaba. A pesar del desorden cronológico el espectador se lleva una imagen limpia y poética de quien fue esta mujer que explicó Chile al mundo. Ejemplar el trabajo musical y actoral de Francisca Gavilán que da vida a una Violeta apasionada, intensa, brutalmente sincera, lúcida, pícara, y de carácter por momentos severo, arcaico e incluso para algunos, intransigente.
De nuevo, cinco años más habríamos de esperar hasta que en 2016 viera la luz una pequeña gran obra de arte. El trabajo de artesanos del cine que es “Cantar con Sentido” de Malitza Agustí, Cecilia Toro y Leonardo Beltrán. Un cortometraje de animación donde arpilleras bordadas y protagonistas de plastilina cobran vida a través de la técnica stop-motion para contarnos la historia de la Violeta a modo de cuento-poesía. Una historia trágica a la que ella misma puso fin porque quizá, como se narra en el cortometraje a través de las palabras de Atahualpa Yupanqui, “los pájaros azules ya no le cabían en la cabeza y decidió abrirles un orificio de escapada. Y los pájaros azules se fueron pero le llevaron la vida”. Una vida a la que agradeció todo lo que le había dado, componiéndole un himno hoy ya universal.
Este 2017 y para conmemorar el centenario de su nacimiento se han estrenado ya dos documentales. El primero “Violeta más viva que nunca” que como ya hiciera “Viola Chilensis” recoge los testimonios de figuras cercanas a Violeta Parra, entre ellos Alejandro Jodorowsky, Gonzalo Rojas, Carmen Luisa Cereceda, Paco Ibáñez, Eduardo Lalo Parra y Gastón Soublette; la diferencia en absoluto trivial es que quién recoge ésta vez esos testimonios y se pone al frente de la dirección es Ángel Parra, quien mano a mano con Daniel Sandoval rinde así tributo a su madre.
El segundo documental estrenado este año ha sido “Intensamente Violeta” un documental dirigido por José “Pepein” Retamal y que se centra en el extenso legado que nos dejó esta chilena universal.